Día Mundial de la Poesía: Todos los días son de la poesía.
El Recital Poético, "El Oro de los Tigres", es un recorrido por doce de los libros del escritor argentino Jorge Luís Borges; de los cuales se han antologado diecinueve textos, entre poesía y prosa, donde su simbología más recurrente: el eterno retorno, el rio y el tiempo, el sueño y la muerte, el Golem, los libros y la noche, el paraíso y la biblioteca, el tiempo y el laberinto, el vértigo y la memoria; el otro, el mismo y los espejos, conmocionan al lector, convertido en ésta liturgia de la palabra, en unánime espectador y relector de sus versos.
Recital invitado a las VIII Jornadas Borges y los Otros, Fundación Internacional Borges, Buenos Aires, 2008.Gira Nacional en Concertación con el Ministerio de Cultura de Colombia, 2008 y 2009.
El poema "Arte Poética", de el libro el "Hacedor", es uno de los textos que conforman el Recital, y con el cual queremos celebrar hoy 21 de Marzo, y todos los días que nos restan, el Día mundial de la Poesía.
El Recital Poético, "El Oro de los Tigres", es un recorrido por doce de los libros del escritor argentino Jorge Luís Borges; de los cuales se han antologado diecinueve textos, entre poesía y prosa, donde su simbología más recurrente: el eterno retorno, el rio y el tiempo, el sueño y la muerte, el Golem, los libros y la noche, el paraíso y la biblioteca, el tiempo y el laberinto, el vértigo y la memoria; el otro, el mismo y los espejos, conmocionan al lector, convertido en ésta liturgia de la palabra, en unánime espectador y relector de sus versos.
Recital invitado a las VIII Jornadas Borges y los Otros, Fundación Internacional Borges, Buenos Aires, 2008.Gira Nacional en Concertación con el Ministerio de Cultura de Colombia, 2008 y 2009.
El poema "Arte Poética", de el libro el "Hacedor", es uno de los textos que conforman el Recital, y con el cual queremos celebrar hoy 21 de Marzo, y todos los días que nos restan, el Día mundial de la Poesía.
Arte Poética
Mirar el río hecho de tiempo y agua
y recordar que el tiempo es otro río,
saber que nos perdemos como el río
y que los rostros pasan como el agua.
Sentir que la vigilia es otro sueño
que sueña no soñar y que la muerte
que teme nuestra carne es esa muerte
de cada noche, que se llama sueño.
Ver en el día o en el año un símbolo
de los días del hombre y de sus años,
convertir el ultraje de los años
en una música, un rumor y un símbolo,
ver en la muerte el sueño, en el ocaso
un triste oro, tal es la poesía
que es inmortal y pobre. La poesía
vuelve como la aurora y el ocaso.
A veces en las tardes una cara
nos mira desde el fondo de un espejo;
el arte debe ser como ese espejo
que nos revela nuestra propia cara.
Cuentan que Ulises, harto de prodigios,
lloró de amor al divisar su Ítaca
verde y humilde. El arte es esa Ítaca
de verde eternidad, no de prodigios.
También es como el río interminable
que pasa y queda y es cristal de un mismo
Heráclito inconstante, que es el mismo
y es otro, como el río interminable.
y recordar que el tiempo es otro río,
saber que nos perdemos como el río
y que los rostros pasan como el agua.
Sentir que la vigilia es otro sueño
que sueña no soñar y que la muerte
que teme nuestra carne es esa muerte
de cada noche, que se llama sueño.
Ver en el día o en el año un símbolo
de los días del hombre y de sus años,
convertir el ultraje de los años
en una música, un rumor y un símbolo,
ver en la muerte el sueño, en el ocaso
un triste oro, tal es la poesía
que es inmortal y pobre. La poesía
vuelve como la aurora y el ocaso.
A veces en las tardes una cara
nos mira desde el fondo de un espejo;
el arte debe ser como ese espejo
que nos revela nuestra propia cara.
Cuentan que Ulises, harto de prodigios,
lloró de amor al divisar su Ítaca
verde y humilde. El arte es esa Ítaca
de verde eternidad, no de prodigios.
También es como el río interminable
que pasa y queda y es cristal de un mismo
Heráclito inconstante, que es el mismo
y es otro, como el río interminable.
Jorge Luis Borges
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